HISTORIA DE LA ESTACIÓN SANTA ANA.
La estación Santa Ana se localiza en el km. 327.5 de la nomenclatura actual, en la que fuera la línea troncal del Ferrocarril Central Mexicano en la ruta de Irapuato a Manzanillo, en el poblado de Acatlán, a una altura sobre el nivel del mar de 1356.5 m. En el año de 1899, este poblado se encontraba cercano a la hacienda de El Plan, el rancho La Resolana y la Hacienda Bellavista.[1]
La estación Santa Ana Acatlán se edificó sobre la línea de Guadalajara a Tuxpan perteneciente al antiguo ferrocarril Central Mexicano. Fue construida mediante la concesión número 17.[2] De acuerdo al plano del patio de la estación Santa Ana Acatlán de fecha 3 de agosto de 1900, este contaba con una longitud de 1000 metros, colindaba con un camino nacional. Dentro de los límites del patio se observa la existencia de un edificio para casas de sección, posteriormente cercano a la estación se indica un pozo, una bomba y un tinaco con surtidor de agua.
Cercano a éstos se marca un local que se indica era arrendado al señor Miguel J. Vidrio para restaurant localizado frente al cobertizo de la estación. En el extremo poniente del patio se encontraba la casa del agente[3] o jefe de la estación. La estación contaba con un ladero a un costado de la misma y otro mas para dar servicio a tres bodegas localizadas en el extremo oriente del patio. Una de las bodegas se marca para el señor Manuel L. Corcuera.
Paralelo a este ladero existía un camino que probablemente comunicaba con los terrenos y edificaciones colindantes a la estación pertenecientes a la Hacienda El Plan.
La estación dentro del patio se encuentra alineada entre la vía principal y el ladero. Es de planta rectangular con las dependencias dispuestas a lo largo del edificio rematado en uno de sus costados con un cobertizo a dos aguas como el resto de la estación. Es de un solo nivel sobre el que se distribuyen los espacios de la siguiente manera. En el lado sur se encontraba el área de bodega, un local destinado la bodega del Express, posteriormente bodega de equipaje, la oficina del jefe de la estación con mirador hacia la vía principal, sala de espera al interior con taquilla para venta de boletos y un cobertizo exterior en el extremo norte.
Contaba además con muelle de carga a ambos lados de la estación y ladero. Los materiales de construcción son ladrillo, mampostería de piedra, adobe, madera y lámina. En el desplante de los muros, en los remates en esquina y en jambas y cerramientos de puertas y ventanas había de ladrillo aparente. Contaban con carpintería y herrería en las ventanas. El piso exterior en el cobertizo y andenes era de cemento acabado natural. La cubierta del cobertizo se sostiene por pies derechos de madera apoyados sobre bases de piedra. Todo el edificio se cubría con una cubierta a dos aguas de lámina acanalada.
La estación Santa Ana Acatlán se edificó sobre la línea de Guadalajara a Tuxpan perteneciente al antiguo ferrocarril Central Mexicano. Fue construida mediante la concesión número 17.[2] De acuerdo al plano del patio de la estación Santa Ana Acatlán de fecha 3 de agosto de 1900, este contaba con una longitud de 1000 metros, colindaba con un camino nacional. Dentro de los límites del patio se observa la existencia de un edificio para casas de sección, posteriormente cercano a la estación se indica un pozo, una bomba y un tinaco con surtidor de agua.
Cercano a éstos se marca un local que se indica era arrendado al señor Miguel J. Vidrio para restaurant localizado frente al cobertizo de la estación. En el extremo poniente del patio se encontraba la casa del agente[3] o jefe de la estación. La estación contaba con un ladero a un costado de la misma y otro mas para dar servicio a tres bodegas localizadas en el extremo oriente del patio. Una de las bodegas se marca para el señor Manuel L. Corcuera.
Paralelo a este ladero existía un camino que probablemente comunicaba con los terrenos y edificaciones colindantes a la estación pertenecientes a la Hacienda El Plan.
La estación dentro del patio se encuentra alineada entre la vía principal y el ladero. Es de planta rectangular con las dependencias dispuestas a lo largo del edificio rematado en uno de sus costados con un cobertizo a dos aguas como el resto de la estación. Es de un solo nivel sobre el que se distribuyen los espacios de la siguiente manera. En el lado sur se encontraba el área de bodega, un local destinado la bodega del Express, posteriormente bodega de equipaje, la oficina del jefe de la estación con mirador hacia la vía principal, sala de espera al interior con taquilla para venta de boletos y un cobertizo exterior en el extremo norte.
Contaba además con muelle de carga a ambos lados de la estación y ladero. Los materiales de construcción son ladrillo, mampostería de piedra, adobe, madera y lámina. En el desplante de los muros, en los remates en esquina y en jambas y cerramientos de puertas y ventanas había de ladrillo aparente. Contaban con carpintería y herrería en las ventanas. El piso exterior en el cobertizo y andenes era de cemento acabado natural. La cubierta del cobertizo se sostiene por pies derechos de madera apoyados sobre bases de piedra. Todo el edificio se cubría con una cubierta a dos aguas de lámina acanalada.
[1] Solórzano Gil, Mónica, Rescate y conservación de las estaciones de ferrocarril en Jalisco, Op. Cit. cfr. Plano geográfico I-2212, capítulo 3, p. 87
[2] Evaluación arquitectónica, histórica y cultural de estaciones de Ferrocarril. Estación Santa Ana, 1994, en: Elementos para la Reutilización de la infraestructura ferroviaria en el Estado de Jalisco. CONACULTA, Centro Nacional para la preservación del Patrimonio Cultural Ferrocarrilero. Museo Nacional de los Ferrocarriles Mexicanos.
[3] Agent’s cottage.
[2] Evaluación arquitectónica, histórica y cultural de estaciones de Ferrocarril. Estación Santa Ana, 1994, en: Elementos para la Reutilización de la infraestructura ferroviaria en el Estado de Jalisco. CONACULTA, Centro Nacional para la preservación del Patrimonio Cultural Ferrocarrilero. Museo Nacional de los Ferrocarriles Mexicanos.
[3] Agent’s cottage.